En la era del “no tengo tiempo” y “todo lo quiero servido”, muchas veces caemos en ciertas “comodidades”, pero que en verdad, tienen un alto precio: nuestra salud y la del planeta.
Todo lo que veas envasado, ademas de que ya no tiene la vitalidad
de un alimento fresco, tiene envoltorios que llenan el planeta de plástico, ensuciándolo, sin ninguna finalidad más que ahorrarte de cortar o pelar una verdura…que locura! Despertemos!! En serio crees que te vas ahorrar mucho tiempo comprando una bandeja de verdura congelada? Seamos sinceros, no economizamos nada y estamos corriendo un riego grande al no tomar conciencia de las consecuencias que tiene.
Volvamos a las bolsas para hacer las compras, a reciclar, a reutilizar, a tomar contacto con los alimentos que vamos a ingerir, que nos van a aportar salud y vitalidad. La Revolucion de la Conciencia comienza en casa y con simples actos.
REEMPLAZA
- Verduras congeladas y envasadas por: Verduras frescas cortadas y peladas en el momento
- Jugos en botellas o cajas por: Jugos de frutas y verduras hechos en casa
- Leches en caja por: Leches vegetales frescas y nutritivas
- Harinas refinadas y envasadas por: Harinas de legumbres y cereales molidos en el momento
- Cajas de té por: Infusiones aromáticas con hierbas o cascaras de frutas
- Agua mineral embotellada por: Agua filtrada en casa y transportar en recipientes reutilizables
La lista puede ser muy larga
Y recuerda que todo lo que esta envasado, empaquetado, enlatado, generalmente tiene conservantes, colorantes, y un montón de químicos perjudiciales para la salud, ademas de que perdieron nutrientes, que están refinados, y hay que sumarle la contaminación que generan a nuestro medio ambiente.
Presta atencion cuando compres, puedes elegir comprar suelto. Volvamos a la verdulería del barrio, a las ferias, a las tiendas que venden a granel. Piensa cada dia antes de salir de casa, que vas a necesitar y llévatelo. Es solo cuestión de Conciencia y Voluntad.
Lleva tu bolsa, tu vaso, tu botella o termo, tu recipientes con alimentos, y hace las cosas en casa. El tocar los alimentos, olerlos, sentirlos, elegirlos, cortarlos, pelarlos, estar en contacto directo, nos conecta con la Esencia Verdadera de la Vida. Y es un Gran Acto de Amor Hacia Ti, y Hacia el Planeta.